ES LA HORA DEL HUÉSPED (parte1)

ES LA HORA DEL HUÉSPED. parte 1

Vivimos en una nueva realidad en la que hace apenas un año y medio ninguno de nosotros hubiéramos imaginado. Una realidad que parecía transitoria, pero que, por lo visto, tiene visos de convertirse en una nueva forma de vida que nos afecta en muchas áreas.
 
Es evidente que los primeros meses nos pilló desprevenidos, primero los encierros y las mascarillas, luego confiados en la solución milagrosa de la vacuna, que nos hacía creer que seríamos inmunes y que volveríamos a vivir como antes…
 

Pero esta nueva realidad, es muy probable que haya venido para quedarse y que tengamos que aprender a convivir con ella.

Por esta razón me gustaría desviar la atención a la otra cara de la moneda; el huésped. El huésped no es más que cada uno de nosotros (nuestro organismo), el cual, por lo visto, parece que hayamos olvidado en muchos casos. Sé que es más cómodo pensar que tapando la boca con una mascarilla (aunque no para ingerir calorías vacías) y pinchándose una vacuna ya tengo hecho los deberes y sigo saludable y preparado para llevar mi vida de siempre.
 
Ponerse una mascarilla y vacunarse es, dentro de lo que cabe, más fácil que cambiar los hábitos... pero deberías saber que no es suficiente para potenciar tu salud, tu sistema inmune y multiplicar la esperanza de vida y la respuesta al virus. Y este es el problema, que una vez pasado el “shock” inicial, la gran mayoría de huéspedes no sólo no ha mejorado su salud, condición muscular y metabólica, grasa corporal, hábitos alimenticios y mentales… sino que me atrevo a afirmar que muchos HUÉSPEDES ESTÁN MÁS ENFERMOS que hace un año y medio.


 
Este virus ha desvelado, aunque no seamos consciente en muchos casos, los déficits asociados a una sociedad no tan saludable como debería esperarse. Por lo tanto, nos encontramos con un huésped que no es más que el resultado de una sociedad metabólicamente enferma, con casi la mitad de la población adulta con sobrepeso, con un 40% de la población adulta que se declara sedentaria y más de dos tercios trabajaba sentada antes del confinamiento, y las cifras se han disparado durante este año y medio, situando a España en el top ten de los países europeos con más sedentarismo, a diferencia de Suecia o Finlandia (que tienen peor clima) donde sólo un 6%-7% se declaran sedentarios.
Según la Fundación Española del Corazón, en nuestro país, el 24% de los niños de 5 a 6 años sufre sobrepeso (la media europea es del 15%).


 
El “I informe del Observatorio de la Vida Activa y Saludable. Termómetro del Sedentarismo en España”, indica que la inactividad física es la responsable del 13,4% de las muertes al año en España, lo que representa MÁS de 52.000 vidas CADA AÑO.
 

Y en el huésped está una gran parte de la solución, eso sí, dicha solución es activa y requiere empezar a cambiar muchas cosas de nuestro estilo de vida,

¿por qué?

Porque está demostrado científicamente que una mejor condición muscular reduce de forma clarísima las hospitalizaciones y muertes por COVID-19.

- ARTÍCULO
 
Voy a ser claro, la gran mayoría de las personas muertas y afectadas gravemente por este virus son obesos y personas con síndrome metabólico y sedentarias (sin considerar personas mayores de 80 años) y no voy a entrar a juzgar casos anecdóticos no relevantes estadísticamente. Deberías saber que estas patologías no son congénitas, la gran mayoría de ellas nos las hemos buscado nosotros solitos por nuestro estilo de vida insalubre y por no cuidar nuestra dieta ni estimular nuestra musculatura durante años.

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Me gustaría que reflexionaras y llegaras a la conclusión que, ahora más que nunca, tienes que empezar a cuidarte y pensar que un virus necesita de un huésped para replicarse. Sino lo haces y sigues con tus malos hábitos, tienes muchas más papeletas para que se te complique tu salud ante este virus.

Este es un pequeño resumen de varios aspectos en los que debes incidir para mejorar la salud y potenciar tu respuesta inmune:
 

• Trabaja la fuerza y potencia metabolismo muscular de forma constante. 1-2 veces semana y mantén una vida activa. Sube escaleras en lugar de ascensor.
• Cuida tu dieta más que nunca. Elimina los procesados y azúcares refinados, asegúrate que tu ingesta de proteínas es óptima y controla la calidad los carbohidratos (alimentos de km0 y comida real). Añade grasa buena en tu dieta (aceite de oliva, pescado azul, aguacate…). Equilibra tu ratio de omega 3-6. Recuerda, todo lo que viene en un paquete, deberías tirarlo por el retrete. Si tienes algún tipo de trastorno o problema de salud, consulta con un nutricionista. 
• Elimina lo máximo posible el alcohol.
• Si no tienes algún problema de salud que te lo impida y tu cuerpo responde bien, empieza a realizar ayunos intermitentes de 16 horas al principio, que pueden ir incrementándose poco a poco y en determinados días. Hay cada vez más literatura al respecto, especialmente en personas con síndrome metabólico y en cáncer.
• ¡¡¡Deja de fumar ya!!! El tabaco mata más que el COVID-19 (artículo)
• Toma el sol. Además, deberás suplementarte con Vitamina D, especialmente si no te vas a vivir a una isla tropical sin contaminación y tomas el sol en bañador 20-30 minutos diarios. La Vitamina D es clave en muchos aspectos, porque en realidad es una pro-hormona. Y tiene mucho que ver con la calidad del sistema inmune innato (Natural Killers y Linfocitos T). Consulta a un especialista y mira tus niveles de Vitamina D cuando te hagas una analítica.
• Potencia tu sistema inmune con suplementos como Zinc y Vitamina C. Consulta un especialista que te recomiende dosis para tu caso específico.
• Controla tus horas y horario de sueño y tus niveles de estrés.

En la siguiente entrada del blog, la hora del huésped, parte 2, hablaremos de cómo el trabajo de fuerza de alta intensidad te prepara para mejorar la respuesta ante la cascada inflamatoria como la que produce el COVID-19.

P.D: Es un honor para nosotros decir, aunque sea estadísticamente poco relevante, que en SLOWFIT, no hemos tenido ningún fallecido por COVID-19. (y eso que nuestra media de edad es más elevada que un gym tradicional, con muchos clientes de más de 60 años).

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